|
|
|
|
|
ETAPA: (Del fr. étape). 1. f. Trecho de camino de un recorrido determinado. 2. f. Lugar donde se hace una parada de descanso durante un desplazamiento. 3. f. Fase
en el desarrollo de una acción u obra. 4. f. Mil. Ración que se da a la tropa en campaña o marcha. La vida son etapas. Si una es aguililla las puede distinguir. Es algo positivo. Pero en muchas ocasiones tienen un orden no establecido.
Modo explicándome un poquito: Cuando se cierra una, no hay que pretender volver... Modo explicándome
un poquito más: Cojamos una enfermera stándar. Su andadura comienza en la universidad. Aprende todas
las asignaturas, se sorprende, asimila realidades, comportamientos, descubre su trabajo, y todo lo que ello conlleva: relación con compañeros, horarios, etc. Digamos que la idiosincrasia de su profesión en todas sus facetas.
Le preparan, en definitiva, para la realidad de su trabajo. Y se le muestra el abanico amplio de posibilidades que existen. Se le prepara para buscar su caminito profesional.
Pincha naranjas, le hace rcp a un muñequito, extrae sangre a otro muñequito con otros 1000 pinchazos, ve huesos limpitos en la sala de anatomía, y para ella, por lo menos durante el
primer año, las bacterias son esas cosillas cuya única consecuencia son reguerillos en una placa de Petri. También están las prácticas. En ese momento atisbas
levemente todos los aspectos de la profesión que la teoría científica no abarca. Pero continúan en el interior de esa preenfermerilla los ideales de idealidad onírica
enfermera. Quieres ser la mejor enfermera, la más íntegra, la que mantiene sus ideales. Es una etapa muy bonita, necesaria y que marca las
bases del futuro trabajo. Pero sería raro volver a ella. Superar etapas significa asumir riesgos.
Asumiendo riesgos llegas a entender el global y te sientes libre, libre de poder elegir, de descubrir opciones y cuestionar tu propia idiosincrasia, de formarte, de descubrir otros puntos de vista que enriquezcan el tuyo. Acabas
abriéndote a la realidad. Sin perder tu criterio más íntimo, pero enfrentándolo al mundo.... En un arriesgar, pierdes cosas, otras se quedan, y siempre tienes la oportunidad de ganar
algo. Ésa es la búsqueda. Ése es el trabajo, poder perder, intentar ganar, y evaluar lo que va quedando.
En el ámbito artístico pasa algo parecido. Hay que mirar a futuro, exponerse, arriesgarse. No
se puede entender pinchando naranjas.
Te gusta esta página
Pequeño Nicolás... ayyyyy pillastre!!! O no... Vuelvo a empezar. Little Nicholas, perfect spy.. Mola éste país, lo digo en serio, mola. No nos tomamos nada en serio. Mola.
Porque la comedia rebela mayor drama. A lo Berlanga. Retomemos el caso Litvinenko. ... ... ... Un dramón: Espías dobles, asesinatos por encargo, amenazas, sobornos, traiciones, represión,
persecuciones... Joder, pero qué bien nos iría a todos si el Hollywood de la guerra fría lo hubiera manejado Berlanga. En serio lo digo eh? El pequeño Nicolás, our little pretty Nicholas
ES UN ESPÍA!!!! El polluelo ha trabajado todo ese tiempo para la inteligencia (?) española, ha recibido encargos de recabación de información por parte del gobierno y la casa real invitado por los altos cargos. Y ha recibido los
correspondientes agradecimientos. Se me ponen los pelillos de la nuca como escarpias cuando pienso en las decenas de Nicolasillos revoloteando y emitiendo soniditos mientras esparcen sus semillitas. A ver, la realidad de los dos
casos es similar, pero el trato es diferente. El tema está tan jodido que ya nos parece normal y hasta nos despollamos. - Aparecen fotos de un chavalillo más mal que bien formado acompañado de altos cargos del gobierno y en estancias
privadas de la realeza. - Aparece la pechotes (no tiene relevancia, pero por darle el toque Pajares-Esteso) - Los altos cargos, sorprendidos, niegan haber dado permiso para que se tome la merienda en su casa o para que vaya en sus coches oficiales
a la uni. - Y... (redoble de tamborrrr) aparece en el SÁLVAME DELUXE (o un sucedáneo), de gratis, porque el líder de Podemos (el grupo político que quiere cambiar al sistema pero que internamente funciona como el sistema,
que es la esperanza para mucha gente, pero que también es el amortiguador perfecto de la población exhausta para que no queme la Moncloa a lo Bastilla en un arrebato de mala hostia) sólo quiere acudir en el plasma y con una pregunta pactada
(ay dios..., me meo....), Nicolás aparece contando los pormenores de lo que a primera vista parece una especie de trama Watergate modo sopa castellana. ¿Que no nos tomamos nada en serio? Ok. Gracias a
Dios. No nos tomamos en serio a la monarquía corrupta, a los bancos, al trato al ébola, al hambre, a los deshaucios, al paro, al trato vejatorio, a los impedimentos sociales, a ningún partido político. Nos descojonamos. Thanks
god. El drama supremo. Estamos Que viva el chiqui-chiqui eurovisivo que se ríe de la caspa de las televisiones pública europeas que en su mamoneo se gasta el dinero público en un pseudoconcurso que no
le interesa a nadie, salvo a países del este muy serios todos con ésto, pero que tienen a sus poblaciones sin resursos sociales, explotados, en guerra o muriéndose de hambre... Se rió hasta de nosotros mismos. Y que viva.
Estamos resignados, nos han dado tantas hostias que ya nos la suda La cosa está fatal... ... Y yo me descojono. Porque así, entre currusco y currusco de pan nos podremos comer una gamba. Y disfrutarla.
Cuando la mierda es insoportable, el llanto se convierte en risa. Dice María Belón que hay cosas que las palabras no pueden expresar, sólo las expresa el arte: ¡Que viva Berlanga!
Buenas noches...
Te gusta esta página
Ñoñeces. Cuando hablamos de arte, de teatro, de las fantasías etéreas nos volvemos gilipollas. No me extaña que la peña huya a veces de movidas de éstas como
de la peste.... A ver, la cosa es que me veo sujeta en peligro eh? Cuando la falta de tiempo te impide llevar una vida social normalizada corres el riesgo de convertirte en artista gilipollas. Artijjjta con jota.
No hablo de perder la sensibilidad y ese toque lunático precioso que muy pocas personas tienen, hablo de aislarte y acabar haciendo onanismo teatral, que a nadie le interesa, o ingresar en una secta teatral autoinfligida, con temas
tan manidos y propensos a la identificación como el movimiento en los tiempos del cólera, o el humo en el espacio vacío. Repasemos: - Monago, las tarjetas black, Urdangarín y la casa real al completo,
el 75% de los cargos municipales imputados. Ladrones por doquier. - Paro juvenil cercano al 50%, y el afortunado trabajador con un salario y condiciones deleznables. - El mundo patasarriba. África, Ucrania, el mundo islámico.
Lo que deriva en: - Frustración, depresiones, alcoholismo, emigración, desencanto, falta de creencias, de valores, odios raciales, falta de asertividad, abusos en relaciones, problemas familiares. - Problemas en relaciones afectivas.
Bien, no me lo saco de la manga, sólo hay que ir viviendo con los ojos abiertosen el barrio, en tu trabajo y con la gente cercana. Eso de lo que no se habla y todo el mundo siente... No hablo ni de política ni de ideologías,
hablo de cómo nos afectan éstos contextos en nuestras vidas. No hablo de teatro protesta ni político. Hablo de realidad. No de sentimientos etéreos abstractos. También, pero reales... No olvidemos que
nuestra profesión también es un negocio, y que por mucho que queramos hacer creer que estamos por encima de ello (lo que nos hace más hipócritas y ruines) ésa es la realidad. Así, así, es
como se pueden realizar obras como el anuncio de lotería de este año. Que de acuerdo, es un anuncio del estado, y de algo tan material como la lotería, pero quién no se ha puesto en la piel de ese pobre hombre, y del camarero, y
de su mujer.... Sencillo, pero la vida está llena de tragedias insultantemente simples. A ver si abrimos los ojos. Gabon
Te gusta esta página
El jugador número 12. El más importante. El juez con potestad intrínseca. El que decide hacia dónde va la historia. El que decide lo que ve. El que da calor si tercia. La causa. El efecto. El motor. La
pieza más importante. La viga maestra. La abeja reina. El principal, el segundo y el postre. La uva en el vino. El público. Escribimos un texto (un gran texto que pasará a la gran historia universal
de la literatura jajaja) recogiendo historias, pensamientos y conversaciones. Comenzamos a trabajar, basándonos en acciones, atmósferas, subtextos, imágenes, desequilibrios. Vamos, en lo que creemos saber hacer.
Trabajamos primero ejercicios para saber hacia dónde nos llevaría la historia, y luego empezamos a ensayar, con nuestro orden particular. Cambiamos el texto a veces porque no nos cuadraba... En fin, un proceso al uso, standard, muy serio.
Como semos nostras.. Luego vienen los bloqueos, las dudas, las dudas y las dudas. Llega el día del estreno. ... ... ... Ni puta idea de lo que va a pasar. Nadie,
absolutamente nadie ha visto la criatura. Y no tenemos más narices que tirarnos al vacío con un par de cosas claras: que no hay nada que perder, que estamos seguras de que pase lo que pase, desde nuestra precariedad, lo hemos trabajado y que
de los errores se aprende, y de que queremos contar algo por encima de todo. QUEREMOS. Y ocurre. No sabemos lo que ocurre, pero ocurre. Suena a supertópico, pero las dos coincidimos, no sabemos qué ha
pasado. Y no somos novatas del todo. El público, la santísima trinidad escénica, nos ha resuelto todas las dudas, nos ha cambiado acciones según acontecía el asunto. Nos resolvía el desequilibrio.
Todo lo que creíamos y querríamos haber controlado desaparecía. Y no nos bloqueaba, no nos llevaba por otros derroteros, no se convertía en otra cosa. Nos ayudábamos mutuamente. Las dos hemos sentido un calor que Barbra
no había sentido nunca, y yo dudo haberlo sentido de esta manera. Y de una manera tan inesperada. Y tan inexplicable, no somos capaces de entender qué ha pasado... (lo cual, dicho sea de paso, es una mierda, por aquella tontería
de repetirlo y eso). Igual es una exageración pero la sensación es muy muy muy guapa, y sólo por el simple hecho de haberlo vivido hay que decirlo. Alguna puta reacción había en el público.. Y no logramos saber cuál
fue la pólvora. Quizá es que en él mismo está ese poder.... No sé, sólo adivino que ésto pasa cuando tienes el privilegio de trabajar con una persona tan honesta, con las cosas tan claras
respecto a su trabajo, que no tiene ego y que aunque difiera mucho de ti en algunos aspectos, conecta contigo (No me atrevo a decir que Barbra ha dicho lo mismo de mi porque no es exacto, pero algo parecido, como casi nunca lee este blog, no se dará
cuenta, jajaja) Y el no querer demostrar nada, sólo vivirlo, contar algo, sin mandangas... Respecto a lo que puedes controlar, porque lo del público es incontrolable, el calor, el diálogo. No sabemos si se volverá
a repetir, pero por esta vez y por haber podido vivirlo: ¡¡GRACIAS!!
Te gusta esta página
Bueno, a falta de la mitad de dosis de la segunda temporada, voy a dar un repasito a esta, para mi gusto, buena serie. Drama y comedia en el mismo plato: buena ensalada. Al final eliges por recomendación, como las buenas
fruterías, y he de decir que a primera vista no me entusiasmó, pero la verdad es que está muy bien dirigida, y de entre todas las actrices, no sabría a cuál elegir. Resulta una serie en la que por fin
se le da una vuelta al lado femenino, se busca dentro de la psicología femenina sin el filtro ni machista, ni excesivamente feminista. Tampoco dentro del coro de actrices encontramos los estereotipos que aparentemente encarnan los personajes; así
que he de decir también que la dirección de actores y las actrices son sobresalientes. Al principio parece una historia superficial de una chica acomodada que ingresa en la cárcel. Pero a medida que avanza la trama
nos encontramos con la progresión y el análisis de su carácter, tanto los puntos blancos como los puntos negros (sus relaciones, su familia, su pasado, su futuro) dentro de un clima en el que te encuentras contigo misma sí o sí.
Vamos, como si ella fuera indagando en su persona a la vez que nosotros. Muy interesante. Los secundarios son de lujo, no sabría con cuál quedarme y a su vez dota a la historia de una riqueza máxima, al darles en su
pasado la oportunidad de justificarse. Unas historias estereotipadas intencionadamente al comienzo, para después dotarlas poco a poco, del lado más humano. Como si desde el sofá ingresáramos en esa cárcel y las fuéramos
conociendo poco a poco. No olvidar tampoco el reflejo de muchos aspectos de la sociedad y de la política e idiosincrasia del momento. Altamente, altamente recomendable.
Te gusta esta página
|
|
|
|
|
|