Viola Davis.
En criadas y señoras ya demuestra ser de esas actrices que te ponen los pelos de punta con solo una mirada.
La que es capaz de soltar una lágrima sin cambiar ni un
gesto de su cara.
La de los monólogos interiores.
La que lleva su drama dentro en todo momento, tenga que sonreír, matar o sentir compasión.
La que suelta una frase en un tono plano y no
sabes por qué se te suben los ovarios a las amígdalas y tu corazón pega un vuelco.
De esas que parece que no hacen nada.
De las buenas.
De la que te las crees en una escena
de cama aunque no tenga un cuerpo sexy.
De las que no viven de su imagen y salen totalmente desmejoradas y les importa un huevo.
De las que aman su profesión.
De las que anteponen la historia
a su propio ego y le importa un huevo quitarse la peluca.
Le importa un huevo instagram, facebook y su puta madre.
Ved Criadas y Señoras.
Ved Cómo defender a un asesino.
Lo que hace en la serie es acojonante, un personaje terrible que por su trabajo ve siempre la peor posibilidad o el lado más oscuro de las cosas.
Normalmente piensas que es paranoia tuya. Pero ¿qué pasa cuando se
convierte en real todo lo que piensas y tu propio hogar, tu refugio se ve invadido por toda esa mierda?
Es el débil haciéndose el fuerte.
Por fin un papel interesante para una mujer. Que
no necesita de otros para definirse a si mismo.
Vedla, no tiene desperdicio.
Señora Davis, Barbra y yo somos sus fans súperfans.
Buenas Noches.